Dice la conferencia episcopal española que deben rebelarse todos los católicos contra la asignatura de Educación para la ciudadanía, "con todos los medios legítimos". Cito textualmente el artículo de El País:
La Conferencia Episcopal Española (CEE) aseguró hoy que se puede recurrir a "todos los medios legítimos" para defender la libertad de conciencia y de enseñanza que, a su juicio, "está en juego" con la nueva asignatura de Educación para la Ciudadanía y los Derechos Humanos, puesto que "la gravedad de la situación no permite posturas pasivas ni acomodaticias".
Ahora, mi réplica:
- Cuáles son los medios legítimos, señores obispos? La objección de conciencia, quizás? El boicot en las aulas? Las manifestaciones de "adhesión inquebrantable? Tenemos tradición en este Estado de pataletas y coces arrabaleras de la Iglesia por lo que no es muy descabellado preguntárselo, amatísimos prelados. Se encadenarán ustedes de la Almudena? O mejor se quemarán a lo bonzo en la puerta del Ministerio de Educación?
- Que es para ustedes la libertad de conciencia y de enseñanza? La imposición de una religión sobre las demás? El usufructo de una posición dominante conseguida mediante abusos y filiaciones incuestionables con el poder? Muy señores míos, en la era de la globalización, la multiculturalidad y la multirracialidad, ustedes y su fe son una más en la eterna e inherente al hombre amalgama de religiones. Esta asignatura, este gobierno y este país son los que anhelan una verdadera libertad de conciencia y de enseñanza, libre de sectarismos o imposiciones religiosas.
- Que pretenden con decir que no se permiten posturas pasivas ni acomodaticias? Mantendrán un control de católicos no comprometidos? Repartirán indulgencias plenarias entre los manifestantes? Se manifestará, para dar ejemplo, el santísimo (bajo palio eso sí) con las multitudes enfervorizadas? Reverendísimos padres, dejen de manipular con sus cuentas de la abuela y su verborrea predemocrática. Comiencen por descontar de sus cábalas a los millones de españoles que, aún bautizados, hace mucho que los mandaron a hacer puñetas a pesar de no haber apostatado (ni apostatar libremente nos dejan) y a los otros muchos que ustedes mismos discriminan por no seguir el dogma a piejuntillas. Y entonces, cuando se hayan quedado ustedes y sus patéticas familias supuestamente modélicas (porque de todas las que conozco, ni una se solapa a su criterio) cojan su altavoz marca J. Lo y salgan a la calle, o mejor, quedense en casita y así no nos joroban el tráfico a los españoles del s. XXI.
